Translate

miércoles, 11 de abril de 2012

Las ONG ambientales promueven la conservación y la responsabilidad individual y colectiva

La importancia de la sociedad civil global en temas como el medio ambiente se da gracias a su participación estratégica en la toma de decisiones de los Estados y de las Organizaciones Internacionales. Para ello se precisa una robustez en las redes de modo que no solo circule información sino que con ella se logre ejercer influencia a nivel local y global, con el fin de mejorar las condiciones de vida de los seres humanos a través de la conservación del planeta. Por consiguiente, surge el interrogante: ¿Cómo las OSC de Medio Ambiente inciden en la toma de decisiones de los Estados?
Para responder a esta pregunta nos centraremos principalmente en las ONGs de Medio Ambiente, debido a que son el componente más visible de la Sociedad Civil. Para empezar, la gobernanza global implica la necesidad de insertar las Organizaciones de la Sociedad Civil en las estructuras del gobierno, con el fin de ejercer influencia en las políticas públicas y lograr sus objetivos (RUBIO, 2007, 243). No obstante, participar en el proceso de toma de decisiones no es fácil, por ello se requiere buscar alternativas que posibiliten la presentación de problemáticas y de las alternativas desde la sociedad para la solución de determinadas situaciones que afectan la vida y los derechos de los individuos.
Así trabajan ONG ambientales como WWF, Greenpeace, Amigos de la Tierra, entre otras, ponen a circular información en robustas redes no solo para concientizar a las ciudadanos, sino también dirigidas a los líderes sociales y  políticos para incidir en la toma de decisiones en los temas ambientales como es el caso del cambio climático. Los datos y los hechos muestran que se requieren prontas acciones, y que si bien debe tomarse acción en los diferentes ámbitos (local e internacional), cada uno de los individuos de la sociedad debe y puede lograr un cambio para procurar un ambiente mejor para las generaciones futuras. Todos (estados, mercado y sociedad civil) deben trabajar mancomunadamente.
En realidad, la sociedad civil global es un espacio en el cual los individuos negocian, debaten, luchan o llegan acuerdos entre sí y con los centros de autoridad económica y política (KALDOR, 2009, 44), y las ONG que trabajan para conservar y mejorar el medio ambiente, buscan salvar el planeta a través de discursos y movilizaciones sociales, además debaten y negocian en las distintas cumbres ambientales para mejorar las condiciones de vida. Por lo anterior, dentro de sus funciones se encuentra la formación de opiniones y actitudes claras que permiten identificar la problemática del calentamiento global, y tomar partido en la conservación del planeta.
En segundo lugar, la forma de acción es simbólica, a través de la creación de acontecimientos mediáticos que impactan la opinión pública, estimulan el debate en distintos contextos y modifican los códigos culturales a través de los cuales los ciudadanos toman sus decisiones (CASTELLS, 2000, 14), es por esto que las movilizaciones simbólicas sólo generan influencia en la medida que se relaciona la vivencia individual y colectiva, como dice Castells es el cambio de códigos culturales entorno a nuestra identidad como especie biológica y a la prioridad necesaria a la conservación de la naturaleza; la gran mayoria de ONGs ambientalistas recurren a acciones, testimonios y estadísticas para dar sentido a la problemática que presentan al público en general. Con la información y sensibilización que aportan las organizaciones ecologistas, se logra la inclusión del tema ambiental en las agendas nacionales e internacionales.
También, la capacidad de acción que tienen hoy en día se refleja en aspectos como por ejemplo, el acceso rápido a la información que facilita la interacción entre actores y el proceso de toma de decisiones; la comunicación horizontal, es decir entre iguales que se ayudan para encontrar soluciones viables a los problemas ambientales; y el impacto en medios de comunicación para generar una mayor influencia entre los actores y conocimiento de lo que esta pasando; hoy en día internet se ha convertido en una plataforma en la que activistas ejercen influencia con sus ideas de conservación y defensa del Medio Ambiente a través de la presentación de problemáticas ambientales que impulsan a los ciudadanos a unirse a causas ecológicas y luchar por un ambiente mejor para todos. Además, se encargan de concientizar a los ciudadanos de la importancia de cuidar y proteger el planeta, con el fin de que exista un cambio de actitud frente al comportamiento con la naturaleza.
En tercer lugar, utilizan la actividad de presión, principalmente a través del lobby con el objetivo de generar repercusiones a nivel local y global; la gran mayoría basan sus posiciones en el problema del cambio climático y el impacto que genera para nosotros hoy en día, para nuestros hijos y las futuras generaciones, las cuales se enfrentaran a escasas posibilidades de supervivencia.
En trabajo de denuncia es importante para evidenciar lo que algunos otros actores intentan ocultar. En “Petroleras: cuando lo “verde” ya no vende” (http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2012/03/120229_medioambiente_petroleo_etiqueta_verde_wbm.shtml) se hace una reflexión acerca de la responsabilidad social empresarial y el desarrollo de tecnologías amigables con el planeta. En este caso las organizaciones defensoras del Medio Ambiente presentan la problemática de las compañías de hidrocarburos, las cuales dada la situación económica ya no les importa presentarse como “verdes” sino como impulsoras de la economía; Organizaciones como Greenpeace afirman las industrias del sector de los hidrocarburos, en su afán por extraer el “oro negro” olvidan ser ambientalmente responsables. Simplemente contaminan los recursos (aire, cuerpos de agua, etc).
Finalmente, las organizaciones de la sociedad civil global, especialmente las ONG ambientales y las ecologistas buscan la protección del Ambiente y para ellos parten de la información para concientizar, pero también establecen nuevos valores en las instituciones del Estado, en sus pares (gremios, iglesias, fundaciones, corporaciones, fondos, asociaciones, think thanks, entre otros) y en los grupos de base (juntas de acción comunal). Por ejemplo, en la Unión Europea, Green 10 (grupo conformado por ONGs ambientalistas y redes europeas) se ha encargado de coordinar respuestas conjuntas y recomendaciones para el Consejo Económico y Social Europeo, pues como órgano consultivo de instituciones como la Comisión Europea, el Consejo de la UE y el Parlamento Europeo tiene acceso directo a los tomadores de decisión en materia ambiental. De esta forma, han logrado fomentar una legislación ambiental que pretende hacer de la UE una potencia para el 2020. Ello implica, que cada uno de los Estados miembros de la UE haga lo propio en el ámbito local para aunar esfuerzos en la meta de la Unión.
Desde allí, y mediante los acuerdos estratégicos que se adelantan regional y bilateralmente, se trabaja de manera cooperativa, para que estas ideas se mantengan allende el territorio de la Unión. Las mismas empresas inversionistas de la región deben procurar lo propio en cada uno de los territorios a los que lleguen por la expansión comercial que alcancen. Es importante resaltar que las campañas medioambientales que más impacto han generado son las que relacionan la protección y las personas vulnerables a esas situaciones, de este modo la influencia de estos movimientos se observa cuando persuaden a Estados y Organismos internacionales para que apoyen declaraciones o cambien las posiciones políticas de los países. La principal influencia que lograron las redes ambientalistas se hizo evidente en la Cumbre de la Tierra (Rio de Janeiro, 1992); luego puede anotarse el Protocolo de Kyoto (1997); este año (2012) la ONU declaró el año mundial del agua, que puede tomarse como un ícono que muestra la importancia del precioso líquido. Próximamente, en junio, en RIO +20 se pretende promover el Derecho Ambiental en la promoción del desarrollo.
Los invito entonces a participar con su comentario respecto a: ¿Qué acciones estratégicas están tomando las OSC para participar activamente en RIO+20?

BIBLIOGRAFÍA
MESTRIES, Francis; PLEYERS, Geoffrey; ZERMEÑO, Sergio. (2009), “Los Movimientos Sociales: de lo Local a lo Global”, Editorial ANTHROPOS, España.
NEWELL, Peter. (2000), “Climate for change: non-state actors and the global politics of the greenhouse”, Cambridge, Cambridge University Press.
CICHOWSKI, Rachael A. (2007), “Collective activism for the environment”, The European Court and Civil Society, Cambridge, Cambridge University Press.
CASTELLS, Manuel. (2000), “Globalización, Estado y Sociedad Civil: el nuevo contexto histórico de los derechos humanos”, ISEGORIA.
CLEVES, Ramírez. (2007), “El derecho en el Contexto de la globalización”, Universidad Externado de Colombia.
KECK, SIKKINK, Margarte, Kathryn, (1999), “Transnational advocacy networks in international and regional politics”, UNESCO, Blackwell Publishers, Oxford.
Lesly Rodríguez M.